marzo 11, 2025

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Denuncian abusos en programa de trabajo temporal canadiense


Informe de Amnistía Internacional revela condiciones laborales precarias de inmigrantes en programa. La organización urge a autoridades canadienses a abolir el sistema de visados vinculados y reemplazarlo con permisos de trabajo abiertos


Redacción Canadá Crónica Latina

MONTREAL, 7 febrero 2025.— El Programa para Trabajadores y Trabajadoras Extranjeros Temporales (TFWP) de Canadá fue señalado como un facilitador de abusos generalizados contra trabajadores migrantes. Según un reciente informe de Amnistía Internacional, estos individuos enfrentan condiciones laborales precarias que incluyen jornadas excesivas, salarios por debajo del mínimo, entornos de trabajo inseguros y una notable falta de acceso a atención médica. Estas denuncias revelan un sistema que, en lugar de ofrecer oportunidades, expone a las personas migrantes a explotación y discriminación.

“Canadá me ha destruido”

El informe titulado: “Canadá me ha destruido” y publicado el pasado 31 de enero documenta cómo el TFWP, que permite a empleadores contratar trabajadores extranjeros principalmente para sectores como agricultura, procesamiento de alimentos, cuidados, construcción y hostelería, está estructuralmente diseñado para facilitar el abuso. Un elemento crítico del programa es el sistema de visados vinculados, que ata a los trabajadores a un único empleador, quien controla tanto su estatus migratorio como sus condiciones laborales.

Explotación y discriminación

Las investigaciones de Amnistía Internacional, basadas en 44 entrevistas, revelan patrones sistemáticos de explotación. Los trabajadores reportan frecuentemente jornadas de 70 a 80 horas semanales, salarios inferiores a lo acordado y condiciones de vivienda inadecuadas. Además, muchos sufren discriminación racial y acoso, con casos documentados de violencia física y psicológica.

Mujeres, discriminación adicional

El caso de Benedicte, una mujer camerunesa, ilustra la gravedad de la situación. Tras llegar a Canadá en 2015, fue sometida a abusos psicológicos y sexuales de carácter racista, obligada a trabajar jornadas excesivas y engañada con falsas promesas sobre la reunificación familiar. Cuando finalmente abandonó su empleo debido a problemas de salud, su empleador canceló su visado, dejándola en situación irregular.

Las mujeres migrantes enfrentan discriminación adicional por motivos de género. El informe documenta casos como el de trabajadoras de Costa de Marfil que fueron obligadas a comprometerse a no quedar embarazadas durante su contrato de dos años, bajo amenaza de penalizaciones económicas.

Trabajadores no denuncian

La situación se agrava por la falta de mecanismos efectivos de denuncia y reparación. Los trabajadores, temerosos de represalias que pueden incluir la deportación, raramente reportan los abusos. Quienes se atreven a denunciar se enfrentan a un sistema burocrático complejo, especialmente desafiante para quienes no dominan los idiomas oficiales de Canadá.

Un diseño sistemático

Amnistía Internacional enfatiza que estos problemas no son casos aislados, sino el resultado de un diseño sistemático que afecta desproporcionadamente a trabajadores “de baja cualificación” provenientes del llamado Sur Global.

Recomendación a autoridades

En 2023, México, India, Filipinas, Guatemala y Jamaica representaron casi el 70% de los permisos de trabajo concedidos. La organización urge a las autoridades canadienses a abolir el sistema de visados vinculados y reemplazarlo con permisos de trabajo abiertos, permitiendo a los trabajadores migrantes la misma libertad de cambiar de empleo que tienen los ciudadanos canadienses.

Medidas insuficientes

Según Amnistía Internacional, aunque las autoridades canadienses conocen bien los abusos que ocurren en el marco del TFWP, las medidas implementadas hasta ahora han sido muy limitadas, como el simple aumento de inspecciones. La organización enfatiza que la explotación laboral no es resultado de unos pocos empleadores sin escrúpulos, sino una consecuencia previsible y sistémica de los visados vinculados.

Reformas a lo largo de los años

Para contextualizar, el TFWP se inició en 1973, aunque los primeros trabajadores migrantes comenzaron a llegar desde el Caribe en la década de 1960. A pesar de varias reformas a lo largo de los años, el sistema de visados vinculados ha permanecido como un componente fundamental del programa. Recientemente, en 2024, el gobierno canadiense implementó reformas adicionales, pero estas se han centrado principalmente en reducir el número de personas migrantes en el país y la duración de los visados del TFWP, sin abordar el problema estructural de fondo.

“Misma libertad que los canadienses”

La organización sostiene que ninguna reforma será efectiva si no incluye la abolición total de los visados vinculados. Argumenta que solo reemplazándolos por permisos de trabajo abiertos se podrán abordar las causas fundamentales de los abusos y cumplir con las obligaciones internacionales de Canadá en materia de derechos humanos. Esta recomendación se basa en el principio de que los trabajadores migrantes deberían tener la misma libertad que los ciudadanos canadienses para cambiar de empleo y empleador, lo que les daría mayor capacidad de negociación y les permitiría escapar de situaciones abusivas sin arriesgar su estatus migratorio.

Con información de Amnistía Internacional.